El magnate y creador de WWE ha retornado con la intención de concretar una posible venta de la empresa en el futuro.
Alejandro Gómez
Después de estar fuera de WWE en los últimos seis meses, Vince McMahon ha hecho oficial su regreso a la compañía mediante un comunicado, para incorporarse a la junta directiva de la empresa.
Vince decidió retirarse de su puesto como CEO de la misma en julio pasado, debido a las investigaciones que la junta directiva sostenía por el desvió de más de 16 mil millones de dólares, así dejándole la matuta a su hija Stephanie McMahon y al empresario Nick Khan, además de que el cargo creativo caería sobre Paul Levesque, mejor conocido en el Universo de WWE como Triple H.
En los últimos meses se han percibido cambios notorios en el producto, y es que desde que Stephanie y Triple H tomaron el control de la empresa, la situación ha cambiado e incluso mejorado un poco. Parte de ello es la recontratación del talento que fue despedido por “recorte presupuestal” en 2020 y parte del 2021.
Sin embargo, la comunidad especula que el regreso de Vince McMahon es para tomar de nueva cuenta el control sobre su compañía, aunque el mismo Mr. McMahon ha declarado no tener intenciones de trastocar las funciones, deberes o responsabilidades de los actuales directivos de la empresa.
El regreso del magnate se daría debido a que quiere maximizar la venta de los derechos televisivos, además de una posible venta de la empresa. Hoy mismo se supo que WWE ha contratado a JPMorgan (un importante y gigante financiero), para asesorar a la empresa de cara a una posible venta.
De ser así, la venta se llevaría a cabo en los próximos 3 a 6 meses, mismos en los que se negociaría los derechos televisivos de la programación como RAW, SmackDown y NXT.
Por otro lado, Front Office Sports ha informado que el fondo financiero de Arabia Saudi, estaría interesado como un posible postor, en caso de que McMahon decida poner a WWE en venta.